Guía
Para poder elaborar correctamente la ficha técnica reducida de tu vehículo, necesitamos una serie de fotografías que permitan identificarlo visualmente y comprobar que no presenta modificaciones relevantes.
Debe mostrar la parte delantera completa del vehículo. Que se vean claramente los faros, el parachoques, el capó y el parabrisas. La matrícula delantera tiene estar bien visible y legible.
Imagen tomada directamente desde atrás. Debe incluir los pilotos traseros, el maletero o puerta trasera y la matrícula trasera si está presente. Asegúrate de que no haya reflejos o sombras que oculten detalles importantes.
Fotografía de todo el perfil izquierdo del vehículo. Deben verse puertas, ruedas, retrovisores y cualquier otro elemento del lateral. Hazla desde una distancia suficiente para que el vehículo salga completo y recto.
Igual que la del lado izquierdo, pero del perfil derecho. Asegúrate de mantener el mismo ángulo y distancia para facilitar la verificación visual.